Puede que a largo plazo no, pero a corto sí. Esto es lo que acaba de afirmar el Banco de España que, aunque acoge con optimismo la reforma laboral aprobada por el Gobierno de Mariano Rajoy, reconoce también que puede darse algún aumento del paro.
Para la institución que dirige Miguel Ángel Fernández Ordóñez, el documento, recién sacado del horno, incluye medidas de “gran trascendencia” cuyos efectos a nivel global favorecerán el empleo, aunque no de manera inmediata.
El Banco de España está convencido de que la debilidad por la que atraviesa la economía de nuestros país es lo que hará que no se cree empleo próximamente, con lo que todavía habrá que esperar para comenzar a ver generación de puestos laborales.
Por cierto, dicho organismo informa que la economía española siguió en una tendencia de contracción al inicio del año debido, sobre todo,al bajo consumismo.
