Han estado toda la semana aquí para examinar las cuentas públicas después de que el ejecutivo comunitario pidiese explicaciones al Gobierno sobre las causas y partidas exactas del desvío presupuestario y el anuncio de Rajoy de que el déficit fue el año pasado del 8,5%, no del 6% como se había pactado con la Unión.
La Comisión se ha quejado de que las cifras sobre el déficit español “están cambiando continuamente”. “En noviembre pasado se nos decía que el déficit podría estar entre el 6 y el 7%, a finales de año se nos decía que había una desviación que podía ser de dos puntos y hace apenas unos días esta desviación se convertía en dos puntos y medio”, señaló el portavoz comunitario el lunes.
A ello se añade el malestar, mal disimulado por el presidente Barroso, incluso durante su comparecencia pública junto al presidente del Gobierno, del anuncio hecho por Rajoy de que en 2012 recortará el déficit sólo hasta el 5,8% y no cumplirá con el 4,4% al que se había comprometido Zapatero. De hecho, en aquellas declaraciones a la prensa, Durao Barroso dejó claro que la Unión Europea no relajará el déficit para España hasta conocer los motivos del desvío de 2011 y, sobre todo, los recortes que se incluirán en los presupuestos para este año.