Un vídeo emitido días atrás por la televisión china ha implicado de lleno en un escándalo alimentario a las multiinacionales Carrefour y McDonald’s.
Tan serias fueron las denuncias que ambas compañías han tenido que cerrar sendos establecimientos en China y pedir perdón públicamente.
En la grabación sacada a la luz podía verse la manipulación de los alimentos y que el etiquetado en Carrefour no se hacían de acuerdo los estándares de calidad, vendiendo productos caducados o etiquetados como si fueran de categorías superiores y más caras.
Por su parte, en McDonald’s pudo comprobarse como se vendían al público alitas de pollo caducadas o de trozos de comida recogidos del suelo.
Ambas multinacionales ofrecieron ya toda su colaboración a las autoridades chinas en las inspecciones para conseguir los más altos estándares de calidad alimentaria.