Agentes de las fuerzas de seguridad y del orden detuvieron al dueño de un perro al que arrojó por un pozo de unos 30 metros de profundidad y lo abandonó allí.
Ocurrió hace unos días en la localidad murciana de Los Minados de Jumilla y, afortunadamente, una pareja que pasaba por la zona logró hallar con vida al animal, después de escuchar sus ladridos desesperados.
Ante la negativa del 112 a participar en el rescate -al parecer, no tienen obligación de auxiliar animales-, fueron varios agentes del Seprona los que lograron salvar al perro. Así lo ha denunciado la Asociación para la Protección y Defensa de Animales y Plantas de Jumilla.
El pobre perro arrojado al pozo logró sobrevivir allí atrapado 6 días sin agua ni comida. Según el relato del propietario del perro, pretendía deshacerse del animal porque éste ya no le servía para la caza.